Choni se despide!!!!

Hola! Soy Choni, la abuela del grupo. Hasta ahora no he querido escribir nada porque Juan y Diego se han encargado de ello, con la colaboración ocasional de algún chaval. Sólo quiero añadir que el viaje ha sido estupendo y los chavales uno de los mejores grupos, no el único, con los que he tenido ocasión de compartir viajes de diferente índole, aunque una noche me tuve que enfadar un poquitín (sólo un poco) por los excesos propios de la edad y de la situación ….... Asunto olvidado.

Lo que no olvido y se repite a lo largo de los viajes es lo que Juan llama “excesivo proteccionismo”. Yo soy algo más cruda y lo llamaría “guarrería” y “soberbia”. Sé que esto no va a ser popular pero no es algo que me preocupe. Lo aclararé.

La soberbia: los chicos, algunos solamente por fortuna, desprecian sistemáticamente las comidas de los hoteles, dejan el plato sin apenas probarlo y se van a la habitación a tomar patatitas, galletas, refrescos y cosas por el estilo. Es cierto que la comida no fue siempre exquisita ni muy abundante (Budapest) pero aceptable. Además siempre cabía la posibilidad de comer lo que uno deseara para el almuerzo que era libre. Oí comentarios del tipo: “eso no se lo come ni mi perro”, pues los profesores nos lo comimos y nos aprovechó.

La guarrería: por dondequiera que pasábamos dejábamos huella, vergonzante, por cierto. Cuando se trataba de recoger los platos y quitar la mesa no se hacía a menos de estar insistiendo. Cuando nos citábamos en alguna plaza, a la entrada del hotel, en las salas de espera del aeropuerto,etc. Siempre quedaban botellas vacías, papeles y demás basuras que recogíamos los profesores y algunos chavales que sentían vergüenza ajena.

Da pena que en un grupo tan bueno haya gente que se comporte como si fueran príncipes que necesiten lacayos para cosas tan sencillas como recoger la basura que generan.

Aparte de todo esto, mi enhorabuena por el buen comportamiento en el resto de los aspectos y mi felicitación a Diego y a Juan que fueron unos excelentes compañeros de viaje y que demostraron ser competentes a “jierro”.

Por mi parte, es el último viaje que realizo con grupos (ya va siendo hora de que me retire) y me ha encantado hacerlo en una ciudad tan especial como Praga a la que volveré sin mucho tardar y habiéndome divertido tanto patinando en Viena y bañándome en Budapest. ¡Salud! y ¡sed buenos y limpios! Si podéis ….